Hipertensión arterial: 7 consideraciones que hay que saber


Conocer los hechos puede ayudar a tomar decisiones inteligentes. Es por ello que hoy analizamos algunos argumentos comunes en la creencia popular sobre la hipertensión arterial, que pueden no ser del todo correctos y conducir a problemas severos de salud.


hipertensión arterial

1.)  Mi hipertensión es hereditaria y no hay nada que pueda hacer

Es cierto que la hipertensión arterial puede deberse a factores genéticos. Si padres o parientes cercanos han tenido presión arterial alta, es más probable que la persona la desarrolle también. Sin embargo, opciones en el estilo de vida como practicar actividades deportivas o la dieta, han permitido a muchas personas con antecedentes familiares de presión arterial alta evitar esta patología.


2.) No consumo sal de mesa, así que tengo controlada mi ingesta de sodio

No en todos los casos, pero a muchas personas el sodio puede aumentar la presión arterial. Pero controlar el sodio significa algo más que simplemente evitar el salero en la mesa. También significa verificar las etiquetas, porque hasta el 75% del sodio que consumimos está oculto en alimentos procesados como salsa de tomate, sopas, condimentos y conservas. Cuando compre alimentos preparados y preenvasados, lea las etiquetas. Observe la palabra "sodio" o el símbolo "Na" en las mismas. Estas palabras muestran que cantidades de sodio están presentes.
El requerimiento de sodio por persona es de 500 mg/día aproximadamente. Sin embargo, en promedio, hasta 3 gramos de sodio están contenidos en los alimentos que consume una persona diariamente.


3.) Yo utilizo sal marina o kosher, en lugar de sal de mesa

Mucha gente piensa que estas alternativas son bajas en sodio y que por tanto no significan un problema. Sin embargo, químicamente hablando, la sal marina o la sal kosher son iguales que la sal de mesa: 40% de sodio, y cuentan lo mismo en el consumo total de sodio. La diferencia es que la sal de mesa es una combinación de dos minerales: sodio (Na) y cloruro (Cl).


4.) No tengo síntomas de hipertensión arterial

Sólo en Estados Unidos, 85 millones de personas tienen hipertensión arterial, y muchas de ellas no lo saben o no experimentan los síntomas típicos de esta patología: agitación, nerviosismo, sudoración, insomnio, cara enrojecida. En un sinnúmero de casos, la hipertensión es asintomática, y las personas la padecen durante años sin saberlo. En ese caso, es posible que la presión arterial alta le esté dañando las arterias, corazón y otros órganos. No cometa el error de pensar que, porque no hay síntomas, no existe el problema.


5.) He leído que el vino es bueno para el corazón, lo que significa que puedo beber todo lo que quiera

Si usted bebe alcohol, incluyendo vino tinto, debe hacerlo con moderación. El consumo intenso y regular de alcohol puede aumentar drásticamente la presión arterial. También puede causar insuficiencia cardíaca, conducir a un derrame cerebral o producir latidos cardíacos irregulares. Demasiado alcohol puede contribuir a triglicéridos altos, cáncer, obesidad, alcoholismo, además de provocar accidentes. Si bebe, limite el consumo a no más de dos bebidas al día para los hombres y una bebida al día para las mujeres. Generalmente, una bebida equivale a una cerveza de 355 ml (una lata), un vaso de vino de 120 ml, o un vaso de de 45 ml de bebidas de mayor graduación alcohólica (coñac, vodka, ron, pisco, tequila, whisky, etc.)


6.) Ya me he tomado la presión arterial y estoy bien

Debido a que la presión arterial es fluctuante, con tomársela una vez o en períodos muy prolongados de tiempo no es suficiente. En realidad, debe medirse regularmente y a distintas horas del día. Ya que la presión, por cuestiones hormonales, tiende a subir en determinados momentos a lo largo de la jornada, por ejemplo, muchas personas experimentan una subida de la presión en las primeras horas de la mañana. 


7.) Me diagnosticaron hipertensión, pero ahora la tengo normal

Esta es la excusa que mucha gente utiliza para dejar de tomar la medicación o abandonar la dieta. Hay que ser consciente de que la hipertensión arterial puede ser una enfermedad de por vida y el hecho de tenerla normal en un determinado momento no significa que el problema haya terminado. Siga cuidadosamente las recomendaciones de su médico, incluso si esto significa tomar medicamentos todos los días durante el resto de su vida. 



No hay comentarios:

Publicar un comentario